IGNACIO LOSADA. Las noticias son lo que son, pero cuando las cabeceras se inundan con la actualidad política o el terrorismo, hay quienes echan en falta arrojar un poco de esperanza. Así surgió el llamado periodismo positivo, un proyecto periodístico que busca sacar la sonrisa al lector cuando la realidad más urgente o peligrosa asola los telediarios y periódicos de referencia. Y uno de estos medios digitales es A Plus, fundado por el actor estadounidense e inversor tecnológico Ashton Kutcher.
Creada en 2014 por Kutcher, Evan Beard y Kendall Dabaghi, esta plataforma busca compartir noticias positivas, que muestren al lector que el cambio tan deseado en el mundo no se encuentra en grandes acciones militares o en el desarrollo de instituciones político-sociales, sino que se encuentra en uno mismo. “Está arraigado en nuestra creencia de que cada persona puede efectuar un cambio positivo en el mundo y que todos estamos inextricablemente conectados”, explica el medio.
Uno de los 50 sitios web más visitados en Estados Unidos
Desde su inicio, el proyecto periodístico de Kutcher, Beard y Dabaghi alcanzó un gran éxito. De hecho, meses después de ser fundado, a principios de 2015, ya era uno de los 50 sitios web más visitados en Estados Unidos. Asimismo, actualmente, soporta más de 80 millones de visitas mensuales, según explica A Plus. Este desarrollo se ha llevado a cabo a través de una estrategia “respaldada por datos” y con el “compromiso” hacia la empatía y la calidad informativa.
Por su parte, en A Plus se puede encontrar una gran variedad de contenido (en inglés). Desde noticias de actualidad política o económica hasta artículos sobre el estilo de vida y textos culturales y deportivos, entre otras temáticas. De hecho, esta la principal diferencia que presenta respecto a otros sitios web que publican contenido positivo, como BuzzFeed y Upworthy. Mientras que estos se limitan a cuestiones puramente lúdicas, el medio de Kutcher afronta artículos políticos y sociales.
A Plus arrancó plagiando
El éxito inicial de A Plus se debe, en parte, a que parte de su contenido lo copió de otros sitios. En concreto, en agosto de 2014, se demostró que el medio digital de Kutcher había publicado varios artículos de BuzzFeed, de El Huffington Post y de la web Cracked sin citarles y sin tener el permiso. En aquel entonces, explicaron que se había producido un error con una nueva herramienta que automatizaba la agregación de contenido y lo alteraba levemente.
En concreto, según explicaron Dabaghi y Beard en una entrevista, cuando empezó a funcionar A Plus, la compañía estaba en una “etapa muy experimental” y combinaba “tecnología y alcance social”, detalló Dabaghi. Al final, hubo un fallo y el “experimento” les estalló en la cara. En aquel entonces, la compañía estaba usando una tecnología con la que identificar el contenido que se estaba volviendo viral en Internet y lo copiaba para que un redactor lo reescribiese.
Sin embargo, según detalló Beard, el contenido original copiado se publicó “inadvertidamente” en A Plus, sin que nadie se diese cuenta. Dada la influencia en redes sociales de Kutcher –fue el primer usuario en Twitter en alcanzar el millón de seguidores, en 2009-, el contenido viralizó muy rápido y estalló el escándalo. Asimismo, también se descubrió que A Plus había estado usando imágenes de Instagram sin los permisos ni atribución adecuados.
Tras esto, A Plus limpió el archivo del sitio y actualizó sus directrices de edición al personal. Además, redujo su plantilla de redactores, dejó de usar esa herramienta e implementó un detector de plagio. Desde entonces, y como medida preventiva, todo el contenido que se va a publicar en la web se escanea.
No obstante, este hecho no ha supuesto más que un bache para A Plus, pese a todo pronóstico. De hecho, actualmente, es una de los sitios web más leídos en Estados Unidos –entre los 15 más populares desde navegación móvil-. Y, en total, recibe 27,5 millones de visitantes en Estados Unidos, frente a los 21,3 millones que tiene TMZ o los 19,9 millones de Fox News, según cifras de Quantcast facilitadas por Beard.
No es la primera vez que una persona ajena a los medios apuesta por un medio de comunicación. El fundador y primer directivo de Amazon, Jeff Bezos, compró The Washington Post en 2013 por 190 millones de euros. Y, según indicó el director de este periódico, Martin Baron, en una entrevista a ABC, está adquisición no repercutió en la calidad de las informaciones y su objetividad. “Yo creo que tengo el poder que necesito para dirigir la redacción del periódico”, aseguró.
Foto: techcrunch